domingo, 27 de julio de 2014

LAS MANOS EN LA POLICITEMIA DE LA ALTURA

“EL SIGNO DE LA BANDERA PERUANA”  EN LA POLICITEMIA DE LA ALTURA
Desde el Perú (La Oroya), donde escribimos el  presente blog, celebramos desde el 28 de julio de 1921, la independencia de nuestra patria.  Además de ser día festivo, recordamos a nuestros héroes y honramos a nuestros símbolos patrios entre ellos a nuestra bandera peruana. Nuestra bandera es roja a los costados y blanca al centro y como en todo el mundo la reconocemos desde que tenemos uso de razón.
Por eso es una buena nemotecnia relacionar a nuestra bandera peruana con una manifestación de la Policitemia de la Altura para prevenir sus efectos tardíos y complicaciones
La POLICITEMIA DE LA ALTURA, un proceso de des aclimatación de los residentes en alturas superiores a 3000 metros. Es un estadío inicial de la Enfermedad de Monge y representa un problema de Salud Pública en el Perú, todavía no bien reconocido y sobre el cual hay poco interés, más la preocupación es en los ambientes laborales por las repercusiones económicas y sociales en los trabajadores.
En una población cautiva de más de 2000 trabajadores, con edades entre 40-70años, a la que nosotros controlamos en forma periódica, en La Oroya a 3730 metros sobre el nivel del mar, ya hemos definido en varias oportunidades que el 15 % de ellos son portadores de POLICITEMIA DE LA ALTURA o también llamada Policitemia Excesiva, o Eritrocitosis de la Altura.
Hemos hecho en este mismo blog descripciones clínicas y revisión de la escaza literatura al respecto. Ahora queremos discutir algunos problemas sociales y económicos que encontramos cuando abordamos al trabajador portador de POLICITEMIA DE LA ALTURA.
1.-  En el examen periódico se les encuentra clínicamente normales, pero su nivel de hemoglobina es mayor de 19 gr/dl.
2.- Su actividad laboral es completamente normal.
3.- Un 60 % ya ha sido sometido a “sangrías”, es decir extracción de sangre con reposición isovolémica de soluciones salinas.
4.- La mayoría no entiende la causa del problema, no entienden la relación altura-desaclimatación-hemoglobina alta,  a pesar de haber recibido información médica.
5.- No hay tratamiento medicamentoso para la Policitemia de la Altura, conforme aumenta la edad se incrementa el nivel de hemoglobina y el riesgo de complicaciones: desarrollo de Enfermedad de Monge, Accidentes Cerebrovasculares, trombosis diversas y hasta muerte súbita.
6.- Muchos médicos en la altura no han interiorizado la seriedad del problema y solamente recomiendan sangrías, dietas y otras medidas que tienen algún efecto paliativo pero finalmente no son efectivas.
7.- El único tratamiento efectivo y definitivo es que el paciente migre a nivel del mar.
Entonces se suscita el problema social y económico porque estas personas cuando son diagnosticadas se resisten a la recomendación médica de vivir o construir su futuro y su entorno familiar en el nivel del mar (habitualmente ya tienen su futuro construido y su vivienda en la altura) y por estar asintomáticos no entienden el riesgo de vivir en la Altura con Policitemia.
EL SIGNO DE LA BANDERA
Nuestro trabajo diario con estas personas nos ha hecho aprender formas de explicar la Policitemia de la Altura y mostrar con sencillez la excesiva concentración de glóbulos rojos, colocando una palma de nuestra mano entre las palmas de sus dos manos de estas personas para evidenciar la diferencia de coloración.
A esto le llamamos el “SIGNO DE LA BANDERA” (peruana). Los portadores de Policitemia de altura inmediatamente comprenden que todo su organismo está congestionado con glóbulos rojos tal como se ven en las manos. Así pueden ver la severidad de esta hiperviscosidad y los riesgos a los que están expuestos si no planifican a mediano plazo migrar a nivel del mar para curarse definitivamente de este problema.
Este “Signo de la Bandera” ya es conocido por nuestros trabajadores y es la mejor forma de entender el problema de Salud Pública que crea la Policitemia de la Altura en este 15 % de pobladores de gran altura que siguen viviendo a este nivel.

Aquiles Monroy MD










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